El nombre Alyce nace como un homenaje íntimo y sentido a Alicia Jacinta, abuela de la familia fundadora, quien solía leer cuentos a sus nietas antes de dormir. A partir de esta conexión emocional, decidimos vincular el nombre con el universo simbólico de *Alicia en el País de las Maravillas*, evocando el poder de la imaginación, la ternura y la conexión intergeneracional.
De este imaginario literario tomamos la figura del conejo, ícono de suavidad y delicadeza, cuya peculiar forma bucal inspiró la incorporación de la letra “Y” en el nombre. Esta “Y” no sólo aporta originalidad y carácter visual al logotipo, sino que representa conceptualmente la **silueta del pubis femenino**, símbolo presente en todos los productos de la marca como manifestación de feminidad, sensualidad y empoderamiento.
La elección de esta letra le otorga a la marca una identidad única, reconocible y con una carga simbólica que refuerza tanto su diferencial estético como su trasfondo emocional.